Cuando se padece una lesión causada durante algún tipo de ejercicio físico, son muchas las dudas que los pacientes de nuestra clínica de fisioterapia deportiva nos plantean con respecto a la recuperación y ciertas recomendaciones que nos piden sobre ello. Por ejemplo, pacientes con lesiones en la rodilla se preguntan si se puede andar con el ligamento cruzado roto y las consecuencias que ello puede tener.
Querer volver a la rutina normal y poder recuperar la movilidad y articulación perdida o pausada por ciertas lesiones como puede ser en el ligamento cruzado de la rodilla es algo muy común. En cambio, en este post queremos darte a conocer algunas recomendaciones y consecuencias de andar con el ligamento cruzado roto, entre otros aspectos importantes sobre esta lesión en concreto que quizás quieras conocer.
Ciertamente, existen dos ligamentos cruzados de la rodilla, uno anterior y uno posterior. En esta parte de introducción podemos hablar de los cruzados como plural, si os parece bien, porque veo que se obvia el otro.
Problemas y afecciones del ligamento cruzado anterior
El ligamento cruzado anterior, también referido como LCA, es una banda de tejido que conecta la parte posterior del fémur con la parte anterior de la tibia. Su función consiste en ayudar a estabilizar la rodilla al prevenir que la tibia se mueva hacia adelante en relación con la rodilla. Además, el LCA también ayuda a prevenir que la rodilla se doble hacia dentro o hacia fuera.
Dada la funcionalidad y presión a la que se somete continua y diariamente la articulación, una lesión del ligamento cruzado anterior es una de las afecciones más comunes de la rodilla que puede ocurrir especialmente a causa de ciertas prácticas en deportes de contacto o de choque. Si el ligamento cruzado anterior se rompe o se lesiona, se pueden presentar dolor, rigidez, hinchazón, edema y debilidad en la rodilla. Todo dependerá del grado de la lesión del LCA, de forma que puede incluso llegar a tratarse de una rotura del ligamento en el peor de los casos.
Los primeros pasos para tratar una lesión del ligamento cruzado anterior son descansar y procurar reducir la inflamación. Para ello, es recomendable la aplicación de hielo de manera local para reducir el dolor y la hinchazón de la zona. Si el dolor del ligamento cruzado es severo, es habitual la toma de medicamentos antiinflamatorios que ayudará a aliviar estos síntomas.
La rehabilitación es una parte importante del tratamiento para la recuperación de una rotura de ligamento cruzado anterior. El objetivo de la rehabilitación es restaurar la fuerza y movilidad de la rodilla tras la lesión y una posible operación, por lo que los ejercicios de rehabilitación de ligamento cruzado podrán incluir estiramientos, fortalecimiento de los músculos de la rodilla y ejercicios de equilibrio.
En algunos casos, por lo general la cirugía será necesaria para reparar una rotura de ligamento cruzado anterior. Esta intervención quirúrgica se realiza generalmente para reparar esos ligamentos dañados y restablecer la estabilidad de la rodilla perdida tras la rotura del ligamento. Y ese tratamiento rehabilitador será ideal para favorecer la correcta y pronta recuperación de la cirugía del ligamento cruzado anterior.
Entonces, llevar un tratamiento de fisioterapia para rehabilitación del ligamento cruzado anterior será lo más adecuado para acelerar el proceso de recuperación de forma adecuada. Además, es un modo de llevar un seguimiento específico con un fisioterapeuta deportivo especializado para garantizar que el tratamiento sea el adecuado y pertinente en cada caso.
Causas de la rotura del ligamento cruzado
Los principales factores de riesgo en la rotura del ligamento cruzado anterior incluyen actividades deportivas de contacto o de alto impacto, tales como el fútbol, baloncesto, el fútbol americano, el esquí o el voleibol. Además, otras actividades físicas de resistencia y de alto impacto como correr podrán ser igualmente causantes de sufrir algún tipo de lesión en el ligamento cruzado de la rodilla.
Pero, más aún, existen otra serie de causas posibles que generalmente aumentarán el riesgo de poder sufrir una rotura del ligamento cruzado anterior. Entre ellos, se pueden diferenciar algunos factores biomecánicos:
- Padecer debilidad muscular
- Tener una movilidad reducida en la rodilla
- Una mala técnica de salto o de carrera
- Tener una mala postura corporal
- Tener una sobrecarga excesiva durante el ejercicio
- Padecer lesión previas de LCA
- Estar en una edad avanzada
Además de ello, otra serie de aspectos anatómicos y, por supuesto, ciertos factores en el estilo de vida pueden ser igualmente perjudiciales para las lesiones de ligamento cruzado anterior:
- Una forma anormal de la rodilla
- Una alineación anormal de la cadera
- El sobrepeso
- Llevar una mala nutrición
Clínica de Fisioterapia en Madrid
- Tratamientos individualizados
- Terapia manual
- Ejercicio terapéutico
- Drenaje linfático
- Ecógrafo
- Deportistas de élite
¿Se puede andar con el ligamento cruzado roto?
Claramente, querer andar con el ligamento cruzado roto puede ser un grave error. Por supuesto, dependerá del caso y la gravedad de la lesión que se padezca en el LCA. Pero, generalmente, en los casos de rotura de ligamento cruzado anterior lo mejor será tomar una serie de medidas de precaución para evitar que la lesión vaya a más.
Cierto es que los ejercicios de rehabilitación y de recuperación articular implicar ciertos movimientos de la rodilla, pero todo deberá tener cierto control por parte de un profesional de fisioterapia para ligamento cruzado que pueda evitar perjudicar más la lesión.
Los ejercicios de fortalecimiento para recuperarse de una lesión del LCA incluyen ejercicios de estabilización, es decir, aquellos que fortalecen la musculatura alrededor del área lesionada. Estos pueden incluir entrenamientos de estabilidad del tronco, movimientos de flexión de rodilla, ejercicios de resistencia de piernas, ejercicios de equilibrio y de fuerza.
Los ejercicios de movilidad también son una parte importante de la recuperación de una lesión del ligamento cruzado anterior. Estos pueden incluir estiramientos activos, estiramientos pasivos, técnicas de masaje suave y liberación miofascial. Estos ejercicios ayudan a mejorar la flexibilidad y la movilidad de la articulación así como reducir la rigidez y el dolor.
Es importante que los ejercicios se realicen con precaución y bajo la atención de un profesional especialista en rotura de ligamento cruzado, especialmente si hay dolor o signos de inflamación. El objetivo de la rehabilitación es mejorar la movilidad, fortalecer la musculatura y reducir el dolor.
¿Cuánto tiempo puedo estar con el ligamento cruzado roto?
Los programas de recuperación de una lesión del ligamento cruzado anterior deben ser diseñados específicamente para cada persona. Esto suele implicar ejercicios de rehabilitación de alta resistencia y de movilidad para garantizar una recuperación óptima.
De cualquier modo, tras una intervención quirúrgica por rotura de ligamento cruzado anterior la recuperación supone un proceso de rehabilitación y recomposición de la articulación que podrá implicar una duración de varios meses que variará según los casos y la gravedad de la lesión, pudiendo llegar a alargarse incluso 12 meses:
- En las primeras semanas post-operatorias el tratamiento de fisioterapia se basa en recuperar la movilidad articular.
- En los primeros cinco meses se trata de conseguir ganar estabilidad fortaleciendo la articulación mediante las sesiones de fisioterapia rehabilitadora.
- En los dos meses siguientes se podrá comenzar a incluir en el tratamiento de rehabilitación algunos trabajos de fuerza con una sobrecarga mayor para comprobar la respuesta a impactos mayores.
- Por último, gracias a las sesiones de fisioterapia rehabilitadoras tras la rotura del ligamento cruzado de la rodilla se podrán empezar a recuperar la vida normal anterior, siempre de forma cuidadosa y muy progresiva supervisada por el especialista.
Fisioterapia para roturas ligamento cruzado anterior
Los tratamientos de rehabilitación para la rotura del ligamento cruzado anterior suelen ser muy exhaustivos para garantizar la recuperación completa de la articulación. Como ya hemos mencionado, estos tratamientos de fisioterapia para rotura de ligamento cruzado incluyen una variedad de ejercicios de movilidad, fuerza, resistencia y estabilidad.
Nuestra clínica de fisioterapia deportiva está especializada en todo tipo de lesiones que puedan ser causa de algún tipo de actividad física, así como otras afecciones que puedan llegar a más y tener una mayor gravedad como la rotura del ligamento cruzado anterior.
El protocolo a seguir en Zenit Chamartín siempre cuenta con una parte inicial de reconocimiento de la gravedad de tu lesión, para lo cual ajustaremos nuestro tratamiento rehabilitador de fisioterapia para ligamento cruzado anterior así como los diferentes ejercicios concretos que realizaremos para favorecer tu recuperación.
Como parte de la rehabilitación del ligamento cruzado, los ejercicios de movilidad tendrán el objetivo de mejorar la amplitud de movimiento y reducir el dolor. Por otro lado, los ejercicios de fuerza se usan para fortalecer los músculos y tendones alrededor de la rodilla para ayudar a prevenir lesiones futuras. Además, los ejercicios de resistencia y estabilidad se centran en mejorar la capacidad de la rodilla para soportar el peso del cuerpo y resistir la fuerza externa.
En cualquier caso, todo se adaptará a tus necesidades y las de tu rotura de ligamento cruzado, siendo especialmente cuidadosos. Estaremos a tu disposición para ayudarte a recuperar tu rutina de forma que puedas volver a andar con el ligamento cruzado ya curado y retomar tu actividad física sin ningún problema.